Ni hubo sorpaso de los populistas ni ganaron los liberales. De la mano del vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans, los socialistas holandeses han dado la sorpresa y se han impuesto en las elecciones europeas con algo más del 18% de los votos.
PUBLICIDADHolanda apuesta por Europa de la mano de Frans Timmermans. El Partido Laborista, del vicepresidente de la Comisión Europea, ha dado la sorpresa y ha ganado con algo más del 18% de los votos las elecciones para renovar los 26 escaños que tiene su país en la Eurocámara.
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Candidato a la presidencia de la Comisión por los socialistas europeos, Timmermans tiene un mensaje:
"Me he dado cuenta de que se necesita una Unión Europa diferente, que luche con más ahínco contra la crisis climática, que tenga más protagonismo en los aspectos sociales. Una UE en la que las grandes empresas que evitan pagar impuestos, empiecen a pagarlos", decía al término de la jornada electoral.
Tras los laboristas, con un 15% de los votos, se sitúan los liberales, del primer ministro, Mark Rutte, que gana un escaño y ha logrado evitar el sorpaso que presagiaban los sondeos del populista y euroescéptico Foro para la Democracia, una formación que predica la celebración de referéndum para abandonar la Unión Europea.
Aún así, el líder euroescéptico, Thierry Baudet, se mostró satisfecho con el 11% de las papeletas cosechado en las urnas, porque su partido -que ha absorbido votos de la extrema derecha- entra por primera vez en el Parlamento Europeo.
En declaraciones a la prensa a su salida del colegio electoral en La Haya, el liberal Mark Rutte advirtió de que su país "no valdría nada" fuera de la Unión Europea, aunque reconoció que la intención del Gobierno holandés es promover reformas en Bruselas que reduzcan el gasto y apuesten por políticas comunes en temas como la inmigración y la seguridad.
"Salirse de la eurozona es como saltar por una ventana y esperar a que te salgan alas por el camino", resumió el primer ministro liberal.
El partido llamada Cristiana, que llega en tercera posición, pierde un escaño.
No está tan satisfecho el ultraderechista y también euroescéptico Geert Wilders, cuya formación, el Partido de la Libertad apenas obtuvo el 4% de los apoyos, su peor resultado en una década. El PVV de Wilders ha obtenido el mismo resultado que el 50Plus, un pequeño partido en defensa de los pensionistas.
Los progresistas D66 perderían la mitad de sus escaños para quedarse con dos, la izquierda verde de Groenlinks sube a tres, y el Partido Socialista (SP) también pierde uno y se queda con un único diputado representando al grupo en Bruselas.
Todos estos partidos han incluido en sus programas electorales, de una manera u otra, reformas urgentes en el funcionamiento y la estructura de la Unión Europea, con el objetivo de reducir gastos y promover políticas comunes aplicadas a todos en determinados asuntos, como la inmigración y la Defensa.
En cuanto a la participación, el talón de aquiles de las Elecciones Europeas, según datos de la agencia Ipsos, el 41% de los holandeses con derecho a voto ha acudido este jueves a las urnas, lo que supone un aumento de la participación en comparación con las últimas elecciones europeas de 2014, cuando solo votó el 37,3% del electorado.
PvdA: laboristas; VVD Partido Popular de la Libertad y la Democracia (liberales); CDA: partido cristiano; FvD: Foro por la Democracia (euroescéptico); Groenlinks: verdes; D66: liberales; ChristenUnie: cristianodemócratas, PVV: extrema derecha; SP: Socialistas; 50Plus: defensores de los pensionistas; Partij voor de Dieren: animalistas
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Holanda y Reino Unido son los primeros de los casi 427 millones de europeos en votar en las elecciones parlamentarias, este viernes continuarán Letonia, Malta, Eslovaquia y República Checa y el domingo el resto de Estados .
Los resultados electorales oficiales solo podrán conocerse el próximo domingo, una vez cierren los colegios electorales de los 28 países de la Unión europea, con el objetivo de no influir en la intención de voto de los demás ciudadanos que votan el 26 de mayo.
Inicialmente, todos los países debían votar en domingo, pero varios Estados como Holanda -que no celebra elecciones en fin de semana- o Reino Unido -que convoca comicios solo los jueves- protestaron y la UE dio la posibilidad de repartir estas elecciones en varios días, siempre que sea entre el 23 y el 26 de mayo.