El debate de los seis candidatos que aspiran a presidir la Comisión Europea se caldeó cuando abordaron el tema de la austeridad y de sus consecuencias para los ciudadanos. También hablaron de cambio climático e inmigración
PUBLICIDADEl hemiciclo del Parlamento Europeo se transformó el miércoles por la noche en un plató de televisión para acoger a los seis candidatos que aspiran a presidir la Comisión Europea.
Varios temas calentaron el debate. Y entre ellos, la inmigración.
"Cada vez que alguien muere en el Mediterráneo, Europa pierde un poco de su alma", dijo Frans Timmermans, el candidato socialista." Estamos perdiendo nuestra esencia al no resolver este problema".
Jan Zahradi, el candidato de los Conservadores y Reformistas, le respondió echándole en cara las pol´íticas que impulsó desde su cargo como vicepresidente del ejecutivo comunitario. "Nunca repetiría el error que cometió la Comisión al introducir cuotas obligatorias. Desaforturnadamente no funcionaron, solo sirvieron para profundizar la division entre el este y el oeste". le espetó Zahradi.
El debate alcanzó su momento álgido cuando afrontaron la cuestión de la austeridad y de sus consecuencias para los ciudadanos.
Timmermans lanzó un ataque directo contra el candidato de los Populares, Manfred Weber. "Cuando la Comisión Europea dijo "adelante", Manfred Weber dijo: "No, hay que castigar a Portugal".
El aludido, Manfred Weber, respondió recordándole que el comisario Moscovici era socialista y que el actual presidente del Eurogrupo es también socialista. "En mi oponión todos deben asumir sus responsabilidades, los socialistas no deberían atacar sus propias políticas", se defendió Weber.
A la cita no podía faltar la lucha contra el cambio climático. Hubo desacuerdo sobre la velocidad de la transición hacia una economía más limpia.
"Sabemos lo que tenemos que hacer, tenemos los instrumentos", dijo Ska Keller, candidata de los Verdes. "El problema es que varios de los grupos aquí presentes han votado constantemente en contra de las medidas para luchar contra la crisis climática, que es una crisis real".
La candidata de los Liberales, Margete Vestager, puso el énfasis en los aspectos positivos de la transición. "Puede servir para crear millones de empleos", defendió Vestager. "Por ejemplo, construyendo líneas de alta velocidad, para asegurarnos de que la gente pueda bajarse de los aviones para tomar el tren".
Desde el partido de La Izquierda insistieron en cambio en evitar que los ciudadanos paguen las consecuencias. "Estoy totalmente en contra de que se desplace el problema hacia los ciudadanos más débiles imponiéndoles nuevos impuestos como ha hecho en Francia el presidente Macron". opinó Nico ¨Cué. "Para salvar los bancos encontraron miles de millones. Hay medios para luchar contra el cambio climático."
Estas fueron las posiciones que defendieron los candidatos cuando faltan tan solo diez días para las elecciones europeas. De su resultado dependerá que uno u otro se convierta en presidente de la Comisión Europea.