Mateusz Morawiecki, que dirigió el Gobierno polaco de Ley y Justicia (PiS), ha sido acusado de "abuso de poder e incumplimiento de deberes oficiales", lo que podría acarrearle hasta tres años de cárcel.
El ex primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, se enfrenta a una posible pena de prisión después de que los fiscales del país le acusaran por su implicación en el intento de organizar elecciones presidenciales por correo durante la pandemia de la COVID-19. El actual líder adjunto del partido conservador Ley y Justicia (PiS) ha negado que lo hiciera de mala fe y acusa al Gobierno actual de llevarle ante los tribunales por motivos políticos.
En 2020, en el punto álgido de la pandemia, el Gobierno dirigido por el PiS intentó organizar elecciones presidenciales por correo, alegando que actuaban por interés público y para proteger la seguridad de los votantes. La idea causó división entre los políticos polacos, ya que la oposición alegó que beneficiaría al entonces presidente en funciones, Andrzej Duda. Las elecciones se retrasaron un mes y finalmente se celebraron en persona, votando en los colegios electorales.
Aun así, Duda ganó las elecciones por un estrecho margen. Cuatro años después, Morawiecki se enfrenta a cargos de abuso de poder y abandono del deber, que podrían acarrearle tres años de cárcel si es declarado culpable. "Si tuviera que volver a tomar la decisión de prepararme para organizar unas elecciones en aquel momento, haría exactamente lo mismo", declaró Morawiecki, que renunció a su inmunidad en el caso.
"Actué por Polonia. Lo sigo haciendo a día de hoy". Calificó la decisión de convocar elecciones por correo de "difícil pero necesaria y responsable", afirmando que "el deber de las autoridades es velar por el orden y el funcionamiento eficaz del Estado".
¿Es un acto de venganza política?
Desde su llegada al poder, el Gobierno de coalición dirigido por el actual primer ministro Donald Tusk ha llevado a los tribunales varios casos contra antiguos ministros y altos funcionarios. El 31 de enero, la Policía polaca llevó ante el Parlamento al exministro de Justicia del PiS, Zbigniew Ziobro, después de que un tribunal dictaminara que debía ser detenido para declarar en relación con una investigación según la cual su partido utilizó el programa espía Pegasus contra opositores cuando estaban en el poder.
Según el PiS, se trata de una venganza política de la coalición gobernante contra su partido. A su vez, los políticos del partido gobernante argumentaron que sus acciones estaban justificadas por la ley. "(Morawiecki) no tenía derecho a hacerlo", afirmó Dariusz Joński, eurodiputado de la Coalición Cívica, en un vídeo publicado en X. "Violó la ley. Las elecciones en Polonia las dictan la Comisión Electoral Nacional y la Oficina Electoral Nacional".
"Simplemente querían robar las elecciones", añadió. "Los 'Tuskitas' y los 'Bodnaritas' no nos escupirán en la cara", replicó Morawiecki en X tras el proceso judicial, refiriéndose a Tusk y al ministro de Justicia, Adam Bodnar.