Para la realeza, encuentros institucionales y compromisos culturales. En el programa de la visita también habrá espacio para celebrar el 20º aniversario de boda de Carlos y Camilla, que contrajeron matrimonio el 9 de abril de 2005.
PUBLICIDADNo se reunirán con el Papa, debido a recientes problemas de salud, pero desde este lunes y hasta el jueves el Rey Carlos III y la Reina Camilla se encuentran en Italia para reuniones institucionales, compromisos y visitas culturales.
Carlos es un gran amante de Italia, pero ésta es su primera visita como Rey. Además de celebrar la amistad entre ambos países y la buena recuperación de los problemas de salud de la soberana, los de la realeza celebran en Roma sus 20 años de matrimonio.
El programa de la visita de Carlos y Camilla a Italia
Los de la realeza aterrizaron en Roma Ciampino el 7 de abril por la tarde y partieron unas 72 horas más tarde. El primer compromiso, el 8 de abril en la capital, es en el Quirinale para ser recibidos por el presidente de la República, Sergio Mattarella. Para la ocasión, está previsto el paso de las Frecce Tricolori, flanqueadas por los Red Arrows, la patrulla acrobática de la Royal Air Force.
A continuación, los soberanos se trasladarán a la Piazza Venezia para depositar una corona de flores ante la tumba del Soldado Desconocido, en el Altar de la Patria. Por la tarde, visitarán el Coliseo y se reunirán con la comunidad británica en Villa Wolkonsky, residencia del embajador del Reino Unido en Italia, en la colina del Esquilino.
El miércoles, en cambio, habrá conversaciones entre el Rey y la Primera Ministra, Giorgia Meloni, en Villa Pamphilj, mientras que la Reina acudirá a un colegio con el British Council. A primera hora de la tarde se dirigirá al Parlamento en una sesión conjunta, y en una mesa redonda con empresarios y los ministros de Asuntos Exteriores de los dos países, antes de la cena de Estado en el Quirinale.
La visita finalizará en Rávena el jueves, con una visita a la Tumba de Dante y las iglesias bizantinas que han hecho famosa a la ciudad en todo el mundo, el Museo Byron y la participación en el Festival de Emilia Romaña, antes de regresar a Londres.