Miles de simpatizantes se congregaron ante el tribunal de Caglayan para protestar por las acciones judiciales emprendidas contra Imamoglu, futuro líder del principal partido de la oposición turca, el Partido Republicano del Pueblo (CHP), y posible rival del presidente Recep Tayyip Erdogan.
Imamoglu declaró durante dos horas ante los fiscales por los comentarios que hizo sobre un fiscal jefe y un perito judicial. Los críticos sostienen que las investigaciones forman parte de un esfuerzo por apartar a Imamoglu de la escena política. El político ya ha sido condenado por insultar a del Consejo Supremo Electoral de Turquía y se enfrenta a una inhabilitación política si su condena de 2022 es confirmada por un tribunal superior. También está siendo juzgado por su presunta implicación en el amaño de ofertas en una licitación de 2015.
Las tensiones aumentaron cuando la Policía antidisturbios impidió que un autobús del CHP se acercara al tribunal, lo que provocó enfrentamientos. La Policía respondió con gases lacrimógenos, aunque no estaba claro si se había producido alguna detención. Imamoglu se dirigió después a la multitud desde lo alto del autobús en otro lugar, declarando: "Desgraciadamente, esto es el resultado de un complot que se intenta montar en Estambul".
Imamoglu, de 53 años, fue elegido por primera vez para dirigir Estambul en marzo de 2019, lo que supuso un golpe histórico para el Partido de la Justicia y el Desarrollo de Erdogan, que había controlado Estambul durante un cuarto de siglo. El partido presionó para anular los resultados de las elecciones municipales, alegando irregularidades, lo que llevó a repetir las elecciones unos meses más tarde, que Imamoglu también ganó. El año pasado fue reelegido alcalde de la mayor ciudad de Turquía.