El presidente del Gobierno ha rechazado que la causa del apagón fueron las renovables o el cierre nuclear, y ha acusado a las eléctricas de promover un discurso interesado. Además, ha presentado su nuevo plan de Defensa.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha comparecido en el Congreso de los Diputados este miércoles para dar explicaciones sobre el gran apagón que dejó a oscuras a toda la Península Ibérica durante horas el pasado 28 de abril, así como del aumento del gasto en Defensa.
En su comparecencia, el líder socialista ha subrayado que todavía se desconocen las causas del apagón eléctrico, pero ha cargado contra las empresas energéticas. "Aquellos que acusan al Gobierno de no dar explicaciones, llevan días recomendando una solución que consiste, qué casualidad, en su agenda ideológica y en los intereses de algunas energéticas que tienen propiedad en las centrales nucleares", afirmó.
"No vamos a trabajar en conclusiones superficiales o interesadas. Vamos a llegar al fondo del asunto porque queremos asumir esas responsabilidades políticas y exigirlas también", añadió Sánchez y aseguró que "no hay evidencia empírica que nos diga que el incidente fue provocado por un exceso de renovables o por la falta de nucleares en España".
Sin embargo, el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo (PP), ha reprochado al presidente que acuda al Congreso con la "osadía de victimizarse" y pide explicaciones inmediatas sobre el apagón. "(El) principal responsable de que haya luz en España es el máximo accionista del operador privado, es decir, el Gobierno", dijo.
Feijóo también ha reclamado la dimisión en bloque de toda la dirección del Ministerio para la Transición Ecológica por lo que ha calificado de "fanatismo", y ha incluido también en su petición a la presidenta de Red Eléctrica, la exministra socialista Beatriz Corredor.
Se reabre el debate de la prórroga de las nucleares
Sánchez sigue manteniendo su postura sobre las centrales nucleares y afirmó que su posición no está condicionada por motivos ideológicos. Aunque se mostró dispuesto a escuchar propuestas sobre una posible extensión de su funcionamiento, nombró tres requisitos imprescindibles: que se garantice la seguridad ciudadana, que la medida sea viable económicamente sin cargar el coste sobre los contribuyentes, sino sobre los grandes propietarios de las compañías energéticas, y que contribuya de forma efectiva a la seguridad del suministro eléctrico.
Subraya que "a día de hoy, estamos muy lejos de cumplir esas condiciones" y recuerda que "ninguna empresa ha presentado aún una solicitud formal para prorrogar la actividad de las nucleares", ya que, según él, las propias compañías siguen evaluando si realmente tiene sentido. Además, insiste en que "estas tecnologías resultan mucho menos competitivas frente a las energías renovables".
El presidente ha respaldado firmemente la estrategia del Gobierno en favor de las energías renovables y ha destacado la solidez del sistema eléctrico nacional. Según ha afirmado, esta transición energética ha logrado reducir en seis puntos la dependencia del exterior y ha contribuido a que el precio de la electricidad en España se sitúe entre los más bajos del continente europeo. La oposición, no obstante, ha señalado que el Gobierno fue avisado hasta "11 veces" en cinco años antes del apagón por lo que "el Gobierno conocía que esta situación podría ocurrir": "¿Va a repetir que fue una sorpresa?", le dijo Feijóo a Sánchez.
Cinco áreas clave del nuevo plan de Defensa
El presidente del Ejecutivo español también ha defendido en el Congreso el aumento del gasto en Defensa como parte de una estrategia para fortalecer la Seguridad Nacional y responder a los desafíos actuales sin comprometer los principios sociales del Gobierno. Ha subrayado la importancia de reforzar las instituciones democráticas ante las amenazas externas, afirmando que "ve necesario aumentar la seguridad y neutralizar las amenazas", y ha hecho un llamamiento a la unidad en la Unión Europea para evitar una fractura entre países más expuestos y otros más distantes del conflicto:
"La UE no puede acabar dividiéndose entre los que tienen miedo por estar cerca del frente y los que observan el temor desde la distancia geográfica y una indiferencia mayor". Sánchez ha recordado que el compromiso de destinar el 2% del PIB a Defensa se adquirió en 2014 bajo el Gobierno de Mariano Rajoy, pero que entonces no se cumplía: en 2018, la inversión era del 0,89%. Ahora, según Sánchez, el crecimiento económico permite alcanzar ese objetivo en 2025, movilizando este año 10.471 millones de euros.
El plan contempla cinco áreas clave: mejorar las condiciones de los militares con nuevas contrataciones (7.600 soldados), reforzar la ciberseguridad ante los aproximadamente 1.000 ciberataques anuales, modernizar el armamento y equipamiento, dotar de capacidades para emergencias climáticas y optimizar el despliegue en misiones internacionales. Sánchez ha recalcado que "España es un país pacifista pero debemos actuar en consecuencia para disuadir a aquellos que nos quieren mal" y que "nuestro objetivo no es amenazar ni alentar una carrera armamentística, nuestro objetivo es disuadir".
También ha insistido en que esta inversión no supondrá recortes sociales ni más impuestos, ya que se financiará con recursos del Plan de Resiliencia, ahorros en el pago de intereses y partidas presupuestarias que han quedado obsoletas tras la pandemia. "Eso nos va a permitir reforzar la seguridad sin renunciar al avance social", ha concluido, defendiendo que el enfoque es coherente con los valores progresistas del Ejecutivo.