La Asociación Judía Europea ha organizado una conferencia en Madrid para tratar el auge del antisemitismo a raíz de la guerra de Israel y Hamás en Gaza. El 55% de los ciudadanos europeos ha empeorado su visión de los judíos a causa del conflicto armado.
A pesar del aumento del antisemitismo, el 82% de los europeos no da prioridad a la lucha contra este movimiento contra la fe hebrea y más del 20% culpa directamente a los judíos de sus propios países de la guerra entre Israel y Hamás, que sigue asolando Gaza. El 55% de los europeos ha empeorado su visión de los judíos a causa del conflicto.
Una encuesta de Ipsos para la Asociación Europea de Judíos (EJA) revela que casi uno de cada tres jóvenes europeos es testigo de actos antisemitas; el 65% de los europeos afirma que el conflicto entre Israel y Palestina está alimentando el sentimiento antisemita en sus respectivos países.
Mientras países como Reino Unido se muestran más favorables con los judíos y las causas que defienden, España se sitúa como uno de los países donde mayor parte de la sociedad culpa a la comunidad judía del conflicto y apoya las acciones de su Gobierno a favor de la comunidad palestina.
España presenta un clima polarizado. Si bien la mayoría de la población concuerda con que la inmigración contribuye al enriquecimiento cultural, también confiesa que los diferentes credos generan tensiones religiosas. España tiene uno de los porcentajes más altos (24%) de encuestados que culpan explícitamente a los judíos del conflicto de Oriente Medio. Al mismo tiempo, el 51,6% de los encuestados españoles que apoyan la acción favorecen respuestas educativas por encima de la seguridad, lo que muestra una tendencia a dar prioridad a las soluciones a largo plazo.
"La EJA hace un llamamiento a los gobiernos, instituciones y universidades europeas para que tomen medidas inmediatas: adopten, legislen y apliquen la definición de antisemitismo de la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto, endurezcan las penas por delitos de odio antisemita, tomen medidas enérgicas contra la incitación en los medios de comunicación y las plataformas online, y garanticen la presencia policial en torno a las comunidades judías", expresó en la convención el presidente de la EJA, el rabino Menachem Margolin.
Los ciudadanos rechazan el antisemitismo manifiesto y se muestran cómodos con sus vecinos judíos. No obstante, según datos del sondeo, se ha aceptado una cierta normalización de los prejuicios sutiles contra la comunidad judía. La encuesta pone de manifiesto que las tensiones geopolíticas se están traspasando al tejido social europeo, la EJA confirma que las comunidades judías son las primeras en sentir las consecuencias.
"El aumento del antisemitismo está desgarrando el tejido moral de Europa. Las comunidades judías son las primeras en sufrir, pero la historia demuestra que nunca son las últimas. Europa debe actuar ahora: proteger a sus judíos o asistir al colapso de los valores que dice defender", concluyó el rabino Menachem Margolin.
Los datos que se extraen de la encuesta muestran que cada vez se culpa más a los judíos de los conflictos de Oriente Próximo y se duda de la lealtad que tienen a los países en los que residen.
Los europeos sienten que están importando odio y el aumento del antisemitismo se ha colado en las conversaciones cotidianas, especialmente entre los más jóvenes. La comunidad judía está preocupada de que este hecho ponga en peligro su seguridad a largo plazo. Mantiene que los gobiernos no están actuando contra estas acciones y que el mensaje que envían es muy negativo: "La seguridad de los judíos no es una prioridad en Europa".
En el encuentro, los istas han denunciado que Europa está importando antisemitismo, y narrativas distorsionadas que se contagian en las calles, escuelas y redes sociales del continente.