El director general de Hitachi Energy explica en 'The Big Question' por qué Europa, y el resto del mundo, necesitan invertir urgentemente en redes eléctricas.
Europa necesita urgentemente aumentar la inversión en sus redes eléctricas para satisfacer la creciente demanda de energía y alcanzar los objetivos climáticos, ha advertido Andreas Schierenbeck, director general de Hitachi Energy.
En su intervención en 'The Big Question' con Angela Barnes, de 'Euronews', Schierenbeck subrayó la urgente necesidad de ampliar las infraestructuras, haciendo hincapié en que las normativas obsoletas y la lentitud de los procesos de concesión de permisos obstaculizan el progreso.
"De repente nos encontramos en una situación en la que necesitamos mucha más energía eléctrica de la que pensábamos", afirma Schierenbeck.
"Como llegamos a esta situación un poco desprevenidos... ahora estamos luchando por cubrir las necesidades. Tenemos que añadir más activos de generación... tenemos que añadir más red. Hay un vacío".
500 GW de energías renovables paralizados por limitaciones de la red
Uno de los retos más llamativos, según Schierenbeck, es que más de 500 gigavatios (GW) de capacidad de energía renovable en Europa están listos para conectarse, pero permanecen inactivos porque no existe la infraestructura de red necesaria. Para ponerlo en perspectiva, 500 GW es energía suficiente para alimentar 50.000 millones de bombillas LED o cargar unos 45 millones de vehículos eléctricos estándar.
Este cuello de botella amenaza la capacidad de Europa para hacer la transición a fuentes de energía más limpias y cumplir los objetivos del Acuerdo de París para 2030.
Schierenbeck comparó el cambio energético con el auge de Internet en los años 90, afirmando que los gobiernos y las empresas deben actuar con mayor rapidez para construir la infraestructura necesaria.
La normativa para evitar el gasto excesivo frena el progreso
Un obstáculo clave, explicó, es que la normativa actual se diseñó para evitar un gasto público innecesario y no para permitir una rápida expansión de la red. Aunque este planteamiento tenía sentido en el pasado, ahora está impidiendo que el sector energético se adapte a los cambios urgentes de la demanda.
Schierenbeck reveló que, aunque los proyectos de ampliación de la red suelen durar entre siete y ocho años, solo dos o tres se dedican a la construcción; el tiempo restante se pierde en largos procesos de autorización y aprobación.
"La normativa se elaboró para ahorrar dinero a los contribuyentes, no para invertir en exceso", dijo Schierenbeck.
"Pero ahora tenemos que cambiar. El coste de no hacer nada o de no ser lo bastante rápido es mayor que el coste de invertir ahora".
La necesidad de una colaboración sin precedentes
Para superar estos obstáculos, Schierenbeck abogó por una mayor colaboración entre gobiernos, empresas y reguladores. Subrayó que los responsables políticos deben reconocer la urgencia de la situación y colaborar con los líderes del sector para acelerar las inversiones y eliminar los obstáculos burocráticos.
Schierenbeck citó un ejemplo de su experiencia pasada en Alemania, donde un gasoducto de alta presión que inicialmente se preveía que tardaría entre cinco y siete años acabó construyéndose en solo nueve meses gracias a la flexibilidad normativa.
"Así se ve el potencial de lo que tenemos si se hacen las cosas bien".
En Hitachi Energy, la empresa trabaja activamente para ampliar la capacidad de producción, desarrollar nuevas tecnologías de red y fomentar asociaciones que puedan acelerar la transición.
El año pasado anunció una inversión de más de 30 millones de euros (unos 32 millones de dólares) en la ampliación y modernización de sus instalaciones de fabricación de transformadores de potencia en Bad Honnef (Alemania). El proyecto, cuya finalización está prevista para 2026, generará hasta 100 nuevos puestos de trabajo en la región y atenderá la creciente demanda de transformadores para apoyar la transición energética limpia de Europa.
Este año también ha anunciado planes para ampliar y aumentar la plantilla de su fábrica de componentes compuestos de Piteå (Suecia).
"Esta inversión responde a la creciente demanda de equipos de transmisión de potencia en todo el mundo, impulsada por la transición energética", afirma un comunicado de la empresa en su página web.
¿Qué pasa si Europa no actúa?
Si Europa retrasa inversiones críticas en redes y energías renovables, las consecuencias podrían ser graves, poniendo en peligro la seguridad energética, la estabilidad económica y los compromisos climáticos. Sin embargo, Schierenbeck se muestra prudentemente optimista y cree que la innovación y las reformas normativas aún pueden hacer posible la transición energética, si se dan ahora los pasos adecuados.
"Nos adaptaremos, encontraremos soluciones", afirmó.
A medida que el panorama energético mundial experimenta una rápida transformación, la capacidad de Europa para modernizar su red eléctrica determinará si puede liderar la revolución de las energías limpias o quedarse rezagada en la carrera hacia un futuro sostenible.
'The Big Question' es un programa de 'Euronews Business' en el que charlamos con líderes y expertos del sector para conversar sobre algunos de los temas más importantes del panorama actual.
Vea en el vídeo de arriba la conversación completa con el director general de Hitachi Energy, Andreas Schierenbeck.