A mayor escala, la orina del maratón de Londres del año pasado podría haber fertilizado suficiente trigo para 3.000 barras de pan.
Hay varias cosas que la mayoría de los corredores hacen antes de un maratón: cargarse de carbohidratos, calentar y -quizá lo más urgente- hacer cola para ir al baño para aliviar los nervios previos a la carrera.
Este año, el TCS London Marathon da una segunda vida a una parte de esa rutina. Por primera vez, la orina de miles de corredoras se recogerá y reciclará en abono para evaluar su capacidad para cultivar trigo. Es la última iniciativa sostenible del maratón más popular del mundo, y está causando sensación en más de un sentido.
¿Se puede convertir la orina nerviosa en abono rico en nutrientes?
La campaña está impulsada por Peequal, una empresa que diseña urinarios para mujeres que, según afirma, son 2,7 veces más rápidos de usar que los orinales tradicionales, y NPK Recovery, especializada en convertir los desechos humanosen nutrientes para los cultivos.
Es la tercera vez que Peequal suministra urinarios a la famosa carrera londinense. Este año, nueve urinarios Peequal estarán situados en la línea de salida amarilla del maratón y es probable que recojan unos 1.000 litros de orina a lo largo del día. Antes incluso de que empiece la carrera, la velocidad será importante.
En los grandes maratones mundiales, las colas para ir al baño suelen ser mucho más largas para las mujeres que para los hombres, lo que puede hacer que se pierda la hora de salida o aumentar el estrés antes de la carrera.
Los fundadores de Lapee, un urinario femenino que asegura reducir el tiempo de uso de un port-a-loo convencional de uno o dos minutos a solo 30 segundos, dijeron a la 'BBC' en 2020 que aproximadamente el 90% de las colas en eventos masivos, como festivales o carreras, son causadas por mujeres que solo necesitan orinar.
El diseño de Peequal ayuda a corregir este desequilibrio, haciendo que la infraestructura de los eventos sea más inclusiva y eficiente. El toque de sostenibilidad viene después de la descarga.
En lugar de enviarse a los sistemas de alcantarillado, la orina recogida se tratará con bacterias para extraer nutrientes como el nitrógeno, una sustancia química muy apreciada por el trigo. A continuación, el abono se probará en campos de ensayo para evaluar su rendimiento.
Según las estimaciones de NPK Recovery, con 1.000 litros de orina se podría cultivar trigo suficiente para unas 195 barras de pan. Si se utiliza la orina de los 53.700 participantes en el maratón del año pasado, se podrían obtener más de 3.000 barras de pan.
Se trata de una innovación respetuosa con el planeta que además mejora el rendimiento. Y para corredores como Susan Farrell, que participa en nombre de la organización benéfica británica para la protección de la infancia NSPCC, también es un plus de bienestar. "Es fantástico pensar que los nervios de miles de mujeres ayudan a una buena causa", afirma.
Los maratones se toman en serio la sostenibilidad
Puede que el reciclaje de orina sea la idea que más llame la atención en el TCS London Marathon de este año, pero dista mucho de ser la única iniciativa ecológica en la línea de salida. En todo el mundo, las grandes carreras se toman en serio las cuestiones medioambientales y se replantean su funcionamiento.
El Maratón de Tokio ha sustituido los vehículos de gasolina por otros eléctricos. En Berlín, los corredores utilizan vasos compostables y pueden viajar gratis en transporte público dentro de determinadas zonas durante el fin de semana del evento. En París, se recogen toneladas de biorresiduos de los puestos de socorro y se transforman en tierra vegetal.
Londres también ha hecho progresos constantes. Las estaciones de recarga a lo largo del recorrido animan a los corredores a deshacerse de los plásticos de un solo uso. En la edición de 2019, incluso se pusieron a prueba vainas de algas comestibles para ver si podían sustituir a los vasos de agua de plástico.
Hoy en día, los participantes también pueden optar por no recibir una camiseta de finisher en favor de plantar un árbol a través de la iniciativa Trees Not Tees. El Ejército de Salvación recoge y reutiliza la ropa desechada en la salida. Y a través de la plataforma You.Smart.Thing, los corredores pueden planificar rutas hasta la línea de salida que minimicen su huella de carbono.
Reciclar la orina es un plan ambicioso, no un chiste
El proyecto piloto de Peequal y NPK Recovery en el TCS London Marathon de este año podría ser sólo el principio. "La orina no tiene por qué ser un residuo", afirma Hannah Vandenbergh, fundadora de NPK Recovery.
"Estamos encantados de desempeñar un pequeño papel en el apoyo a los compromisos de sostenibilidad del emblemático maratón TCS de Londres. En última instancia, queremos ayudar a los organizadores de eventos de todo el mundo a reciclar su orina y reducir su huella de carbono".
El impacto podría ir más allá de los maratones. Esta ingeniosa innovación muestra cómo incluso las rutinas más cotidianas pueden ofrecer soluciones para crear un futuro con más recursos.