Los bomberos han declarado un nivel especial de alarma mientras trabajan para controlar la situación. El tráfico ferroviario en la línea ha sido completamente suspendido según informan los Ferrocarriles Checos. Hasta el momento no se han reportado heridos, aunque la gravedad del incidente ha motivado que personal de la Inspección Ambiental se dirija al lugar para evaluar el impacto de la fuga de esta sustancia peligrosa.
Las autoridades locales están tomando medidas preventivas, con el gobernador de la región de Olomouc recomendando a los residentes permanecer en interiores y no ventilar sus hogares como precaución. Sin embargo, según los datos del laboratorio móvil desplegado en el área, los límites de contaminación ambiental aún no han sido superados, lo que proporciona cierto alivio a pesar de la magnitud del accidente.