El presdiente español contrapone los buenos resultados económicos del país frente a su mayoría precaria en el Congreso y a los frentes judiciales del Ejecutivo.
PUBLICIDADEl presidente español, Pedro Sánchez, ha hecho este lunes su balance político del año. Entre otras cosas, el mandatario ha destacado de forma positiva el crecimiento económico del país, afirmando que España crece "de una manera muy equilibrada, creando empleo y siendo fiscalmente responsable".
El Gobierno se aferra a los buenos datos económicos para contrarrestar los numerosos frentes judiciales que afronta el entorno del presidente para el año 2025. Precisamente hoy el Instituto Nacional de Estadística ha dado a conocer una actualización de los datos del PIB en el tercer trimestre: la economía española creció un 0,8% entre julio y septiembre gracias al impulso del gasto público, que creció a un ritmo trimestral del 2,5%: dos puntos más que en el trimestre anterior.
El jefe del Ejecutivo también ha destacado el incremento de las exportaciones: "En 2024, somos la principal economía exportadora de Europa. Nuestras empresas tienen cada vez más presencia y más prestigio en el extranjero", ha dicho. Sin embardo, Sánchez ha mencionado el a la vivienda como uno de los grandes desafíos a afrontar.
El presidente ha mencionado también el compromiso de su Gobierno con el cambio climático, la sostenibilidad, la reducción de gases de efecto invernadero y la transición ecológica. Además, Sánchez ha destacado la vulnerabilidad de España bajo los efectos climáticos como el estrés hídrico, las olas de calor o la DANA que golpeó a la huerta sur valenciana este otoño.
Sánchez ha reafirmado su compromiso para ayudar la recuperación de las zonas afectadas desde el pasado 29 de octubre. El presidente ha explicado que se han procesado unas 57.000 solicitudes de ayudas y se han transferido 690 millones de euros a la Comunidad Valenciana.
El TSJCV ha decidido que sea un juzgado de esta comunidad el que investigue las responsabilidades políticas de la tragedia climática -con hasta siete denuncias acumuladas en una misma causa- que ha causado 223 muertos y decenas de miles de desaparecidos.
El presidente también ha puesto de relieve el papel de la exministra Teresa Ribera, recientemente nombrada vicepresidenta y comisaria de Competencia y Transición Verde en la conocida como 'Comisión Von der Leyen II', así como el de Nadia Calviño, ahora presidenta del Banco Europeo de Inversiones. Sánchez también ha mencionado el reconocimiento del Estado dePalestina realizado conjuntamente con Irlanda y Bélgica durante este año, con consecuencias diplomáticas por parte de Tel Aviv.
En la rueda de prensa tras el balance, los medios han preguntado a Sánchez por el caso de su mujer, Begoña Gómez, investigada por presunto tráfico de infuencias: el juez Juan Carlos Peinado ha citado el próximo 22 de enero a representantes de Indra, Google, Fundación Manpower, Arsys Internet y Telefónica, así como de la Universidad Complutense de Madrid como testigos en el caso. "El tiempo pondrá las cosas en su sitio a nivel judicial", ha declarado el presidente.
Sánchez reta a Puigdemont pero le conmina a reunirse: "Si Junts, PP y Vox quieren presentar una moción de censura, están en su derecho"
Sánchez ha ratificado su intención de mantener encuentros tanto con el líder 'de facto' de Junts, Carles Puigdemont, como con Oriol Junqueras, recientemente ratificado por la militancia de Esquerra Republicana como máximo responsable del partido.
El presidente abre así la puerta a realizar nuevos encuentros entre socialistas y convergentes al máximo nivel. Todo ello ocurre mientras la ley de amnistía continúa su periplo judicial y los diputados catalanes presionan al PSOE -mediante pinzas políticas con PNV y Podemos- para rechazar algunas votaciones claves para el Ejecutivo en el Congreso, como la del impuesto a las energéticas.
Sánchez ha afirmado que si "Junts, Vox y el PP quieren plantear una moción de censura, están su derecho de hacerlo". El jefe del Ejecutivo ha ironizado con su ascenso al Ejecutivo en 2018, cuando él mismo planteó una moción para “echar” al expresidente Mariano Rajoy: "Entonces me llamaron 'okupa' y, más o menos, siguen haciendo lo mismo", ha dicho Sánchez.